sábado, 6 de agosto de 2011

Típico Relato Post-Apocalíptico Zombie Pt-12

Esto es provocado por noches de aburrimiento... Perdón por las molestias y espero no cansarles..

Capitulo 12º: Temprano en casa

 El polvo fue disipándose, ya se distinguían las caras. Félix y Julia estaban fuertemente abrazados, protegiéndose en uno al otro. Raúl estaba encima de Mairi, por un error de cálculos, al tirarse al suelo se llevo a ella por delante. Sam gateaba apenas sin visión hacia lo que parecía el cuerpo de Amy con la cara mirando al suelo. Coloca la mano en su espalda y tose, el polvo es lo que tiene. Amy lo mira.
 - ¿Estás bien?- Sam con voz ronca, recuperándose de la tos
 - Sí, creo que si- Le responde mirando a los lados con los ojos entrecerrados- ¿Y tú?
 - Bueno… He estado mejor, pero que tu estés bien compensa-
 Amy sonríe.
 - ¡Levántate, me estas aplastando!- Se oye a Mairi desde la otra parte del sótano empujando a Raúl
 - Ya voy, ya voy- Contesta Raúl quitándose tan rápido como torpe
 - ¿Están todos bien?- pregunta haya al fondo Félix
 - Bueno… los que estamos vivos si- Contesta Raúl ya estando de pie
  Hubo un silencio. Y se oyeron ruidos en el primer piso, ruidos parecidos a cuerpos levantándose del suelo e intentando andar. Supimos que no era ni Ricardo, ni Chris, ni tampoco Steve porque solo se oían gemidos.
 Raúl le extiende la mano a Mairi pero esta se la rechaza. Félix y Julia se levantaron prácticamente a la vez sin dejar de abrazarse.
 - Creo que es hora de levantarse, querida- Sam se agacha hasta el oído de Amy
 Amy se ayuda del cuerpo de Sam medio encorvado y se levanta.
 - Gracias, querido- Le dice sonriendo
 - De nada- Responde con un tono tranquilo y suave
 No tardaron en agruparse todos para evaluar la situación.
 Estaban algo perdidos, sabían que había salida pero que daría a la calle y no sabían a donde ir. Quedarse ahí sería una locura. No tienen que comer, porque era un sótano que ni se usaba como almacén. Félix había perdido el arma, creía que lo trajo al sótano pero no estaba por ahí. Sam tenía la escopeta y los seis cartuchos que le quedaban, dos cargados ya en la escopeta. Raúl tenía el hacha. Mairi lloraba en silencio. Amy, al lado de Sam, se llevaba las manos a la cara. No sabían qué hacer.
 - La casa de mi abuela no queda muy lejos de la plaza de al lado- Comenta Raúl
 - Vale, salimos de aquí, vamos saludando a esos bichos con la mano al pasar, llegamos a casa de tu abuela y decimos; “Hola, ya estamos en casa”- Responde Sam sarcástico- Y nos sentamos ahí con tu abuela a esperar que pase todo ¿No?
 - ¡Ay! Tío,  como te pones-
 - Perdona… es que tengo necesidad de vitaminas en el cuerpo-
 - ¿Vitaminas?- Pregunta Mairi, levantando la cabeza
 - Si, zumo- Dice ruborizándose- Aún así, creo, que deberíamos salir lo más pronto posible, dentro de poco anochecerá
 - ¿Y a donde vamos?- Pregunta Raúl
 - A casa de tu abuela no- Responde Sam
 - Podríamos ir a un supermercado, se de uno que hay no muy lejos- Propone Félix
 Julia lo agarra con más fuerza.
 - ¿Y cómo entramos?- Le pregunta Amy
 - Bueno… Lo que tienen algunas salidas de emergencia es que para forzarlas y entrar son muy fáciles, la salida de emergencia de ese supermercado que estoy diciendo es realmente fácil-
 - Macho, creo que diciendo eso todos acabamos de cambiar la idea sobre ti- Dice Sam
 - ¿Lo has hecho alguna vez o solo te has visto “Prison Break”?- Pregunta Raúl
 - Bueno… una vez forcé un armario-
 - Bravo, campeón. Ya esta, suficiente para ir a robar un banco ¿No?- Responde Sam
 - Yo creo que puede hacerlo- Dice Julia
 - Yo también- Le sigue Amy
 Mairi no dice nada, solo se encoge.
 - Entonces… ¿Vamos?- Propone Raúl poniéndose de pie
 - ¿Lo vamos a intentar?- Le pregunta Félix impactado
 - ¿Planteas alguna otra cosa?- Se oye a Sam intentando levantarse
 - No hay más- Amy sigue a Sam, mientras este le echa una mano para que se agarre
 - Ellos saben que puedes- Le dice por lo bajo Julia
 - En verdad no, pero es que esto ya aburre- Corrige Sam- Aparte de que no hay comida
 - ¿Y si no consigo hacerlo?- Dice preocupado Félix
 - “¿Y si no consigo hacerlo?”- Sam lo imita burlonamente- Tira, anda, tira, que me tienes contento
 Entre empujones y risas, Félix se levanta.
 - ¿Si no es lo que tú propones, qué más podemos hacer?- Le pregunta Sam al oído
 - Además, nosotros te cubrimos ¿Que más necesitas?- Le dice Raúl poniéndole la mano en el hombro, mientras sonríe. Aparte de que quiero partirle el cráneo a alguno de esos y en un supermercado hay alcohol
 Sam se ríe y llama borracho a Raúl. Después de dar ánimos y auto-confianza a Félix se lo devuelven a Julia.
 - Yo no pienso ir a mi propia muerte- Eleva la voz Mairi aún sentada y enfurruñada
 - Vamos Mairi, no hay nada más que puedas hacer- Le dice Raúl extendiendo la mano para ayudarla a levantarse
 - ¡No me toques, pervertido!- Grita Mairi empujándolo
 Mientras Sam se ríe casi cayendo al piso, se oyen ruidos más fuertes arriba.
 - ¿Creéis que conseguirán entrar aquí?- Pregunta Sam dejando de reír al instante
 - Si, han derrumbado puertas, supongo que sí- Contesta Félix
 - Deberíamos irnos cuanto antes de aquí, vamos Mairi- Vuelve a insistir Raúl
 - ¡No!- Contestó bruscamente
 Se vuelven a oír fuertes ruidos en el primer piso.
 - A ver, querida, si nos quedamos aquí esos “bichos” entraran y arrasaran con nosotros. Dejando de lado que no tenemos ni comida, ni agua- Sam intenta convencerla- Por eso, te pido que, como nosotros, sigas ese poco de posibilidades que tenemos de sobrevivir
 - Vale…- Dice dudosa mientras se levanta-
 - Que bueno soy, macho- Presume Sam en broma
 - Anda que…- Se indigna Raúl- Qué coño tendrás…
 - Carisma, hermano, carisma- Se ríe Sam
 - ¿Cómo se sale?- Pregunta Félix
 - Según mi tío hay como una especie de trampilla que lleva a la calle- Comenta Amy
 - Creo que es por ahí- Raúl señala a un pequeño hilo de luz, la poca que ya quedaba en la calle
 Una pequeña escalera llevaba a unas puertas deterioradas. Por sus agujeros entraban esos rayos de la escasa luz de la calle.
 - Sera mejor ir yendo ya, nos faltaría que nos pillara la noche en medio de todos esos escombros que antes eran casas y esos monstruos que antes eran personas- Advierte Sam
 - ¿Quién va?- Pregunta Amy
 - Yo- Dice Raúl señalándose
 - Él- Añade Sam señalándole
 Raúl sube por las escaleras, llega hasta la puerta, mira hacia atrás, traga un poco de saliva y empuja la puerta. Pero solo hace ruido y se da un golpe.
 - Macho… ¿Enserio?- Pregunta Sam- Quítale el fechillo
 - Ah, coño- Contesta quitándolo
 Vuelve a golpear y se abre de par en par.
 - Tenemos vía libre- Anuncia alegrado
 Todos van hacia la puerta y salen de allí. Una vez fuera, todas las miradas atentas a Félix que iba cogido de la mano de Julia, esperando que este les indicara el camino.
 Según Félix era siguiendo la carretera hasta el final, allí a la derecha estaba el gran supermercado y detrás una escalera que lleva a la puerta de salida de emergencia que estaba en el segundo piso.
 - ¿Y si por casualidad también está destrozado como la mayoría de casas?- Pregunta Mairi
 - O inaccesible…- Termina Félix
 - ¿Cómo inaccesible?- Pregunta Raúl que iba el primero del grupo
 - Si, lleno de esos seres-
 - Ah, con eso no pasa nada- Dice despreocupado cargando el hacha sobre su hombro- Yo me encargaré de ellos
 - Damas y caballeros, les presentamos a “Conan, el bárbaro” ¡Chan, chan, chan!- Añade, como siempre, Sam con un tono burlón
 - No… pero enserio ¿Qué pasa si no podemos entrar en el supermercado?- Pregunta angustiada Mairi
 - Entonces usaremos el plan B- Responde Sam
 - ¿Cuál es el plan B?- Vuelve a preguntar
 - Raúl, ¿Cuál es el plan B?- Le pregunta Sam
 - El plan B…- Dice pensando- Ya miraremos...
 - Ya miraremos- Repite sonriente Sam mientras mira a Mairi
 - ¿¡Pero donde me he metido!?-
 Faltaban pocos minutos para llegar a ver el supermercado. Raúl iba delante con su hacha, después iban Félix y Julia guiándolo, Mairi iba en medio de todos, Amy iba curiosamente pegada a Sam que iba el último con la escopeta de Ricardo con sus seis cartuchos.

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